El asunto con los dibujos estos autómatas funciona casi como un diálogo entre un cerebro dispuesto a no pensar mucho y una mano decidida a todo. Cuando esa unión sucede, todo lo que salga por ese lápiz es válido hasta que alguien mande a detenerlo, y a veces, cuando eso pasa, es porque las cosas ya se están saliendo de control en la obsesiva misión de rellenar todo el papel. "
Dibujemos pues un hombre con árboles a los lados, y lianas que lo amarran y empujan en direcciones opuestas". Suena interesante, hagámoslo. Es como si fueran a partir al tipo por la mitad, y él grita en desesperación. "
Por supuesto esos árboles deben estar apoyados sobre algo, y eso sería el piso, todo con grama para que se vea bien". Hecho. "
Y también debe haber como una isla voladora en el fondo donde se asiente una ciudad, y en las ventanas de sus edificios seguro hay ciudadanos observando lo que ocurre". Fantástico. La gente nunca pierde su vena voyeurista en lo que al dolor ajeno se refiere. "
Ahora detrás de los edificios pon un sol rojo, con algo parecido a nubes, como si fuesen un vórtice que va a engullir toda la escena". Está como tomando un matiz bastante oscuro esto, aunque va chévere...Bien. "
¿Pueden salir cuervos desde el sol ese como sobrevolando todo arriba y posándose en el árbol?". Ok, ya. Suficiente. "
Pero..." Suficiente.
2 comentarios:
Guau...vaya Poder tienes!! :O
Eres como un genio de lámpara maravillosa... haces realidad muchos deseos... con papel y lápiz!
:D
Interesantísima charla entre el cerebro y la mano...cualquiera no se detiene, jeje. Bonito karim. :p
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